Fotografía Post Mortem
¿Cuántos no se han tomado una famosísima selfie/autofoto?
En la era en que vivimos, la fotografía ha dejado de ser una herramienta
exclusiva de evidencia para momentos especiales; ahora en cada restaurante que
visites puedes ver a muchos tomando una foto de su comida, bebida, o cualquier
cosa que les parezca interesante (las fotos en el baño a veces rayan en lo
desagradable).
A veces, salir sonriendo es todo un reto; y hacer la mejor
pose o encontrar tu perfil bueno puede
llevarte mucho tiempo. Sin embargo, este post no es sobre las bellezas de la
fotos sino de todas aquellas en las que, desgraciadamente, sonreir a voluntad
es imposible pues todos o algunos de sus participantes están muertos.
La fotografía de muertos o difuntos, data de 1839, en
Francia, donde comenzó esta práctica, contagiándose a todo Europa. La idea
central consiste en vestir al cadáver de un recién fallecido con su ropa,
haciéndolo partícipe de un último retrato grupal o individual. Recordemos que
la idea de la foto de difuntos, no era considerada aterradora, mucho menos
morbosa.
¿Y
porqué esta idea tan normal de las fotos post mortem?
MEMENTO MORI; esta frase en latín significa
“recuerda que eres mortal”, por lo cual, la muerte era alabada sin estar llena
de obscuras consideraciones.
Algunos Trucos
fotográficos…
Al ser un tipo de foto bastante aterrador (digo yo), suena
aún peor saber que existían técnicas a escoger para quien quería tomarse una
foto con su ser querido muerto. La técnica más común era simular que el difunto
se encuentra dormido. Las cosas empeoran aquí pues quienes tomaban las
fotografías se hacían de grandes soportes de madera para sostener la cabeza y
otras extremidades…
En fotografías más complicadas, se ponía al difunto en la
mesa, como si se encontrara cenando con su familia, o incluso en el caso de
niños, éstos simulaban estar jugando con sus juguetes.
El Ritual de los niños
muertos en México
México no fue ajeno a esta tradición. Los “angelitos” (como
llamaban a los niños muertos) eran colocados en un altar de madera, con la ropa
en la que habían muerto. Después, sus padrinos de bautizo procedían a ponerle
un ropón de bautizo, y sandalias de cartón o palma. Para hacerlo más
impactante, algunos incluso disfrazaban a sus niños difuntos de vírgenes o
santos, según fuera el caso.
En fin, la historia de estas fotos esta rodeada de muchas
más características artísticas, sin embargo, aquí les dejo una colección de las
fotografías más aterradoras que pude encontrar…
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dejarme algún mensaje en los comentarios. Me ayudarías muchísimo!
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